La cantidad y la frecuencia semanal de ejercicio físico son más importantes para el control de la diabetes que la intensidad o el tipo de ejercicio
Analizamos
un reciente estudio presentado por
Harmer AR, Elkins MR.
Br J Sports Med 2014;0:1–3. doi:10.1136/bjsports-2013-093225
Amount and frequency of exercise affect glycaemic control more than exercise mode or intensity
Introducción:
La
prevención y control de la diabetes tipo 2 es vital. La modificación del estilo
de vida realizando ejercicio físico y disminuyendo el peso corporal incluyendo
dieta, son factores clave para los pacientes con obesidad o prediabetes que
evitarán el desarrollo de diabetes tipo 2. Incluso en pacientes con diabetes
tipo 2 la realización de ejercicio físico mejora la acción de la insulina y
disminuye el riesgo cardiovascular. Solamente la realización de actividad
física reduce la Hemoglobina glicosilada
(HbA1c) y disminuye la adiposidad visceral. El mejor control de la glucemia
reduce las complicaciones microvasculares, y en los nuevos diabéticos reduce
los ACV y la mortalidad.
No
está claro el modelo de ejercicio más adecuado para conseguir un mejor control
de la glucemia.
Objetivos de la Revisión:
Conocer
la mejor evidencia científica sobre qué ejercicio físico es el más adecuado
para el control de la glicemia , estudiando la Cantidad, la Frecuencia y la Intensidad
de ejercicio, y su acción sobre la HbA1c en pacientes con diabetes tipo 2.
Como
objetivo secundario se buscaba conocer qué Tipo de ejercicio es el que mejor
controla la glicemia, el Aeróbico, el ejercicio de Fuerza, ó la Combinación de
ambos: aeróbico y de fuerza.
Bases de datos y criterios de inclusión:
Se
estudiaron 5 bases de datos con publicaciones entre 1985 a 2012. buscando los
términos “exercise”, “physical activity” and “diabetes mellitus”.
Se
seleccionaron los artículos que estudiaban diabetes tipo 2 con intervención de
ejercicio físico al menos durante 12 semanas, con estudios aleatorizados a
grupo control y de estudio. El grupo control no debería recibir la intervención
de ejercicio físico.
Mediciones principales:
La
medida principal es la Hemoglobina glicosilada (HgA1c) que valora las
concentraciones de glucosa plasmática los 2-3 meses precedentes.
Las
características del ejercicio estudiadas fueron:
-
Frecuencia:
número de sesiones semanales
-
Volumen:
minutos de ejercicio realizado durante todo el estudio
-
Intensidad:
o
% de Fc máxima para ejercicio aeróbico
o
%
de 1 RM (repetición máxima) para ejercicio de fuerza
Resultados:
Se
seleccionaron 26 estudios, que incluyeron 2253 participantes:
-
935
pacientes ejercicio aeróbico
-
249
pacientes ejercicio de fuerza
-
1069
ejercicio combinado
Teniendo
en cuenta todos los tipos de ejercicio, el mejor control de la glicemia
determinado por mayor reducción en la HgA1c se alcanzó en aquellos estudios que
aumentaban la Frecuencia (número de sesiones semanales) y el Volumen (duración)
del ejercicio.
En
las intervenciones sólo con ejercicio físico Aeróbico el mejor indicador para
el control de la glicemia mediante la reducción de la HgA1c fue la Frecuencia,
mientras que la Intensidad (% de la Fc máxima) no muestra asociación.
En
las intervenciones sólo con ejercicio de Fuerza, no muestran modificación en la
reducción de la HgA1c.
En
las intervenciones con ejercicios de tipo Combinado, aeróbico y de fuerza, se
encontró que por cada set de ejercicio de resistencia semanal añadido, se
reducía la HgA1c 0.02%
Discusión:
El
principal efecto encontrado es que el aumento de la Frecuencia semanal de
ejercicio aeróbico reduce de manera significativa la HgA1c.
Esto
es así porque se conoce que una sesión única de ejercicio físico aeróbico
moderado aumenta la expresión génica del GLUT4 al menos 3 horas, y que
sólo 7 días de ejercicio físico moderado
aumenta la disponibilidad de glucosa y el transporte de GLUT4 a nivel muscular.
Por tanto, cargas repetidas de ejercicio pueden reducir la exposición de la hemoglobina
a la glicosilación, y por ello el aumento en la Frecuencia de ejercicio reduce
la HgA1c.
Las
otras características de ejercicio estudiadas no parecen tener efecto sobre la
Hg1Ac.
En
los ejercicios de Fuerza, la mayoría de los estudios incluyen una Frecuencia de
3 días por semana, por lo que no se puede analizar la variable de Frecuencia.
Cuatro
estudios incluyeron intervenciones dietéticas, y como se sabe, la pérdida de
peso es un potente reductor de la HgA1c, por lo que en estos estudios la
reducción de la HgA1c puedes ser mayor que el conseguido sólo por el ejercicio.
La
Intensidad de ejercicio aeróbico empleado es baja-moderada en la mayoría de los
estudios. Queda por estudiar los efectos de ejercicio de alta intensidad, y
ejercicio intermitente de alta intensidad, que mejoran más el VO2 max que el
ejercicio de intensidad baja-moderada.
Implicaciones clínicas:
En
pacientes con diabetes tipo 2 debemos insistir que es mejor aumentar la
frecuencia semanal de ejercicio aeróbico, y que es mejor más frecuencia, que
más intensidad o más duración de ejercicio.
Esto
es especialmente importante en pacientes con dificultad en el control de la glucemia, por tener elevada la HgA1c, y aquellos con múltiples comorbilidades.
Para
los ejercicios de tipo combinados podríamos mejorar el control de la diabetes
añadiendo sesiones extra de trabajo de fuerza, aunque la evidencia encontrada
en este es débil.
Clínica ProActitud
Agradecer
al Dr.Harmer el envío de su artículo para hacer este análisis.
Jesús Losa López
Médico
Especialista
en Medicina del Deporte
Clínica ProActitud
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Valladolid, a 27 de mayo de 2014